¿Sientes preocupación al pensar en el costo de la calefacción este año? Purgar los radiadores te resultará muy eficaz.
Realizar un mantenimiento adecuado no solo en la caldera, sino también en todo el sistema, es fundamental para mejorar el rendimiento de la calefacción, reducir el consumo de energía y disminuir tu factura.
Aquí tienes 8 pasos de como purgar los radiadores y equilibrar el sistema de calefacción.
Si tiene cualquier duda de como purgar los radiadores, no dudes en ponerte en contacto con nuestros especialistas de Quim Service.
8 pasos para purgar un radiador
Purgar los radiadores de forma regular, especialmente al comienzo de la temporada de calefacción, ayudará a asegurar un rendimiento óptimo del sistema de calefacción y a mantener un ambiente cálido y confortable en tu hogar.
A continuación, vamos a ver los 8 pasos que debemos seguir para purgar los radiadores.
1. Preparación
Primero vamos a empezar reuniendo todo el material necesario para llevar a cabo la purgación de los radiadores. Para ello debemos coger:
- Una llave de radiador: Esta herramienta se utiliza para abrir las válvulas de purga de tus radiadores. Puedes adquirirla en una ferretería o tienda especializada
- Un cubo: Será útil para recoger el agua que pueda caer al purgar los radiadores. Asegúrate de utilizar un cubo lo suficientemente grande para contener el agua sin derrames.
- Un trapo: nos servirá para secar cualquier agua derramada o gotas que salgan al purgar los radiadores.
2. Apagar calefacción
Antes de empezar a purgar un radiador, debemos asegurarnos de que el sistema de calefacción esté apagado por completo. Esto evitará que nos quememos o nos mojemos durante el proceso.
Apagar la calefacción detendrá el funcionamiento de la bomba de circulación, evitando el movimiento de agua caliente y aire a través de las tuberías.
Además, nos debemos asegúrar de que todas las válvulas termostáticas estén completamente abiertas. Esto permitirá un flujo adecuado de agua durante el proceso de purgado.
3. Esperar a que se enfríen los radiadores
Después de apagar la calefacción, es importante que esperemos aproximadamente una hora para asegurarnos de que los radiadores estén completamente fríos al tacto.
Este tiempo de espera nos ayudará a prevenir quemaduras en caso de que se produzcan fugas de agua o vapor durante el proceso de purga.
La seguridad es primordial, por lo que debemos asegurarnos de que los radiadores estén fríos antes de comenzar el purgado es una medida importante a seguir.
4. Localiza la válvula de purga
Una vez se haya enfriado el radiador, pasamos a examinarlo y buscar la válvula de purga.
Por lo general, la válvula de purga se encuentra en la parte superior del radiador. Se caracteriza por ser un agujero circular con un pequeño cuadrado en su interior. La válvula de purga suele tener un aspecto similar a un tornillo o una pequeña perilla.
5. Recipiente
Una vez situada la válvula que nos ayudará a purgar el radiador, vamos a colocar el recipiente, que previamente hemos preparado, debajo de la válvula de purga para recoger el agua que se liberará.
Debemos asegurarnos de que sea lo suficientemente grande para contener el agua sin desbordarse.
6. Coloca la llave en la válvula y ábrela
En este paso ya procedemos a abrir la válvula. Utilizamos la llave de purga o la llave inglesa para girar la válvula en sentido contrario a las agujas del reloj. Medio giro o un cuarto suele ser suficiente.
Escucharemos un sonido de liberación de aire a medida que se abre la válvula. Si el radiador está lleno de aire, es posible que suene un silbido o un flujo de aire.
Mantenemos la válvula de purga abierta y permitimos que el aire atrapado en el radiador se escape.
A medida que se libera el aire, es posible que existan pequeñas burbujas en el agua del recipiente.
7. Cierra la válvula
Una vez que el aire haya sido eliminado y solo salga agua del radiador, cerramos la válvula girándola en sentido horario.
Debemos asegurarnos de no apretar demasiado la válvula para evitar dañarla.
Después de purgar cada radiador, verificamos la presión del sistema de calefacción. Si la presión es baja, es posible que debamos agregar agua al sistema.
8. Enciende la calefacción
Repetimos el paso con cada uno de los radiadores.
Primero, comprobamos la presión del sistema. En caso de ser demasiado baja, simplemente vuelve a llenar el circuito.
Por último, comprueba que los radiadores se calientan de forma uniforme.
Importancia de purgar los radiadores
Purgar los radiadores regularmente es esencial para mejorar el rendimiento de la calefacción, ahorrar energía, evitar daños y garantizar un confort térmico óptimo en el hogar.
Al eliminar el aire atrapado en los radiadores, se logra una distribución uniforme del calor, lo que mejora el funcionamiento de la calefacción. Esto a su vez reduce el consumo de energía y los costos asociados.
Además, el purgado regular nos ayuda a prevenir la corrosión y los daños en el sistema de calefacción, prolongando su vida útil.
Por último, el confort térmico se optimiza al eliminar las zonas frías o calientes excesivas en las habitaciones. En resumen, purgar los radiadores proporciona un funcionamiento más eficiente, ahorro de energía, protección del sistema y mayor comodidad en el hogar.
Si tiene alguna duda o quiere saber más, no dude en contactar con los especialistas de Quim Service.